ESTE DOMINGO LA IGLESIA INICIA EL ADVIENTO Y EL AÑO LITÚRGICO
Hoy, domingo 29 de noviembre, comienza el Adviento, y con él el nuevo año litúrgico en la Iglesia.
El adviento, que en latín significa venida, es una época de preparación espiritual y se nos presenta como una oportunidad para nuevos retos, desafíos, propósitos...
Tenemos cuatro semanas en las que domingo a domingo nos vamos preparando para la venida del Señor. La primera de las semanas de adviento está centrada en la venida del Señor al final de los tiempos. La liturgia nos invita a estar en vela, manteniendo una especial actitud de conversión.
El Adviento está dividido en dos partes: las primeras dos semanas sirven para meditar sobre la venida final del Señor, cuando ocurra el fin del mundo; mientras que las dos siguientes sirven para reflexionar concretamente sobre el nacimiento de Jesús y su irrupción en la historia del hombre en Navidad.
Hoy, como en todos los templos, en nuestra parroquia se ha colocado la corona de Adviento y se ha encendido la primera vela. Encender, semana tras semana, los cuatro cirios de esta corona debe ser reflejo de nuestra preparación para recibir al Señor Jesús en la Navidad. La luz de las velas nos recuerdan que Jesús es la Luz del mundo que ha venido a disipar las tinieblas. El color verde de la corona simboliza la vida y la esperanza que Él nos ha venido a traer.
Este año 2015, el Adviento comienza el domingo 29 de noviembre y el último domingo de Adviento será el 20 de diciembre.
“Levántate, brilla, Jerusalén; que llega tu luz y la gloria del Señor amanece sobre ti. Pues mira cómo la oscuridad cubre la tierra, y espesa nube a los pueblos, mas sobre ti amanece el Señor y su gloria sobre ti aparece”. (Profeta Isaías)
El adviento, que en latín significa venida, es una época de preparación espiritual y se nos presenta como una oportunidad para nuevos retos, desafíos, propósitos...
Tenemos cuatro semanas en las que domingo a domingo nos vamos preparando para la venida del Señor. La primera de las semanas de adviento está centrada en la venida del Señor al final de los tiempos. La liturgia nos invita a estar en vela, manteniendo una especial actitud de conversión.
El Adviento está dividido en dos partes: las primeras dos semanas sirven para meditar sobre la venida final del Señor, cuando ocurra el fin del mundo; mientras que las dos siguientes sirven para reflexionar concretamente sobre el nacimiento de Jesús y su irrupción en la historia del hombre en Navidad.
Hoy, como en todos los templos, en nuestra parroquia se ha colocado la corona de Adviento y se ha encendido la primera vela. Encender, semana tras semana, los cuatro cirios de esta corona debe ser reflejo de nuestra preparación para recibir al Señor Jesús en la Navidad. La luz de las velas nos recuerdan que Jesús es la Luz del mundo que ha venido a disipar las tinieblas. El color verde de la corona simboliza la vida y la esperanza que Él nos ha venido a traer.
Este año 2015, el Adviento comienza el domingo 29 de noviembre y el último domingo de Adviento será el 20 de diciembre.
“Levántate, brilla, Jerusalén; que llega tu luz y la gloria del Señor amanece sobre ti. Pues mira cómo la oscuridad cubre la tierra, y espesa nube a los pueblos, mas sobre ti amanece el Señor y su gloria sobre ti aparece”. (Profeta Isaías)