La peregrinación a Tierra Santa ya está en Jerusalén. Ayer lunes, los peregrinos salían de Tiberiades y en el río Jordán pudieron renovar las Promesas del Bautismo. Además, antes de llegar a Jerusalén, se bañaron en las aguas saladas del Mar Muerto, visitaron las ruinas de la Jericó Bíblica y llegaron a Betania, patria de María, Marta y Lázaro, entre otras visitas. Y a última hora de la tarde, descubrían Jerusalén. Como decía Juan Pablo II, “Jerusalén es la ciudad del Muro del llanto”, “la ciudad de la Roca”, “la ciudad de la Resurrección”.
Y ya hoy martes ha comenzado la visita a la ciudad santa de Jerusalén: subida al Monte de los Olivos para visitar la Capilla de la Ascensión, la Iglesia del Padre Nuestro y la Capilla del Dominus Flevit, donde los peregrinos han celebrado la Eucaristía. Y de allí, al Huerto de los Olivos,la Iglesia de Getsemaní y la Tumba de la Virgen. Tras el almuerzo, visita al Monte Sión cristiano, al Cenáculo (en la imagen) y la Iglesia de la Dormición de la Virgen.
La tarde ha finalizado con un paseo a pie por el Barrio Armenio, el Cardo Máximo...hasta el Muro de las Lamentaciones.